No se si notaron, en esta cotidiana confrontación de opiniones y reclamos, que pareciera que todos tienen razón al mismo tiempo aun cuando sus posiciones son encontrados.
Algunos argumentan a favor de la cuarentena más estricta posible, otros a favor de su libertad individual, otros unificando e igualando sufrimientos, otros pidiendo que se discrimine con precisión.
No tengo idea quién tiene razón pero ¿No era que todos la tienen?
Durante los últimos meses fue creciendo una necesidad, la de trabajo y libertad, para un país donde todavía, luego de más de cuatro meses, seguimos en una especie de cuarentena.
Nunca fue demasiado fuerte y poco a poco se liberó bastante no por decisión gubernamental sino por la misma gente que no toleró semejante encierro sin plan alguno de salida.
Pero hay posiciones que suenan perfectamente lógicas dependiendo del punto de vista de cada uno.
Para los que estan del lado epidemiológico más estricto la cuarentena parece ser el único método de contención hasta la aparición de una vacuna. Técnicamente es cierto, si la enfermedad no retrocede naturalmente no existe forma de evitarla y sólo se puede posponer su difusión.
Esto funcionó bastante bien en Argentina durante los primeros meses impidiendo el colapso del sistema de salud pero, al mismo tiempo, provocando el colapso de la economía.
Se evitaron muertes por COVID ¿Se evitaron muertes por otras enfermedades? ¿Por miseria? No lo sabemos, no hay cifras oficiales al respecto. Ah, pero todo es culpa de la pandemia, no de la cuarentena! (sic, leí esto de varios que tratan de escudarse en eso aun cuando la mayoría del mundo no está en cuarentena).
Es la opción ideal de la política porque mientras mantenga a la masa encerrada no pagará costo político de los muertos. También es la opción ideal del técnico que ve como única medida de contención si la idea es que no existan muertos. Pero los hay (menos que otros países, claro, y no es menor).
Otros dicen, desde un sentido más pragmático, que la vida conviviendo con la enfermedad es inevitable. Bajo este criterio muchos gobiernos de distintos países, donde el peor costo político es la destrucción de la economía y no los muertos (Aquí asesinamos nuestra economía en ciclos parejos cada 9/10 años).
Suena inhumano pero realmente hay países donde evaluaron el costo/beneficio y prefieren lidiar con infectados y muertos antes que suicidar su economía. En algunos casos salió relativemente bien (Europa en general) porque su población suele aceptar ciertas reglas para mantenerse estable (uso de barbijos, distancia, etc.), en otros casos salió todo mal como EEUU (donde su población es extremademente permeable a las "sugerencias" de cualquier enfermo mental).
Aquí es donde una gran porción de nuestra propia población se está ubicando. PYMES desaparecidas de a miles son el termómetro. Un país que se sostiene gracias a ese empleo pequeño no podrá sostenerse con impresión de moneda y empleo público. Pero ¿Y si se mueren las PYMES de la enfermedad? Algunos creen que es un riesgo "aceptable" y prefieren vivir con ello ?♂️
Estan los más radicales de la liberación que pregonan la convivencia con un virus que no verá una vacuna hasta bastante adelante en el tiempo. En ciertas hipótesis suena lógico, porque si se lograba contener en los primeros meses podía funcionar el tema de las restricciones pero a partir de que se convirtió en pandemia... es inevitable convivir con ésto.
Según este criterio ya es tarde para eso y hay que aprender a lidiar con lo que se tiene. En Brasil el presidente Bolsonaro pretendía esto (algunos morirán, es la vida, dijo) pero no le resultó del todo bien.
En los estados más conservadores de EEUU también salió el tiro por la culata por tener demasiados contagios mas aun no demasiados muertos porque, aquí hay algo que valida parte de esta hipótesis: el sistema de salud, en estos meses, aprendió cómo lidiar con la enfermedad bastante bien.
Y no hay que dejar de mencionar a una gran ¿Minoría? Ni siquiera sé si es minoría pero una gran porción social que sencillamente le importa un bledo todo.
Especialmente fuerte en las generaciones más jóvenes que creen que todo es un chiste, que vive el hoy y se caga en el mañana, que no es afectada de forma directa por los síntomas y cree que todo es una broma. Son muchos así que desestimarlos es tal vez el error más común que se ha cometido.
Es el grupo social que distribuye a diario la enfermedad contagiando a parientes y matando abuelitos sin siquiera hacerse responsable, esos jóvenes que todos quieren entronar porque "saben usar la tablet" son, a la vez, un número enorme de idiotas e ignorantes. Pero ¿Saben qué? Es normal, en toda época de la humanidad fueron así de idiotas porque todos lo fuimos, es una etapa.
La única razón por la que les importa poco es porque no los mata, si fuesen ellos los que muriesen estarían aterrados y pidiéndole a los más adultos que los cuidasen. Para esta camada es más importante no dejar de tener relaciones que la abuelita viva un año más.
¿Cómo pueden estar todos en lo cierto? No tengo idea pero cada uno esgrime sus razones y desde su punto de vista subjetivo y relativo todo parece cerrar perfectamente bien.
Lamentablemente sólo el tiempo y un análisis detallado (serio y racional, no emocional) nos permitirá conocer quién tenía más claro cómo iba a resultar esto. El problema es que ahora estamos ante demasiado ruido, todo es caos, mal intencionado, bien intencionado, como fuere todos tratan de llevar agua para su molino aunque las evidencias los contradigan.
En algún punto intermedio (tal vez no tan en el medio) estará la verdadera solución pero, aun si existiera, es inaplicable. Las posiciones se van radicalizando en la medida que pasa el tiempo y menos se escucha la opinión del otro.
Apela cada uno a una emotividad desmedida dejando la razón por fuera y es justamente la razón la que puede llevarles a una conclusión más manejable. No, todos apelan a sus sentimientos, gritan por sus derechos individuales, algunos violan los derechos del otro, otros creen que los suyos son los más importantes, los rivales de estos sólo creen que los grupales son los que llevan al bien común y así, en un loop infinito.
¿Quién tiene la razón? Bueno, tal vez ninguno.
PS: y amo contradecir el título del post :D