Ha pasado una semanita interesante para uno de los esquemas Ponzi más grandes de los últimos tiempos en Argentina, uno que ahora lidia con causas juidiciales, pedidos de captura y algunas detenciones.
Pero ¿Cómo se llegó hasta aquí? ¿Cómo se destapó todo? Pues bien, no fue gracias a los medios tradicionales sino a, una vez más, gente que, individualmente y por motu propio, decidió exponer la estafa en redes sociales.
Y me pregunto ¿Por qué los medios no decían nada cuando era obvio y sólo actuaron cuando ya todo había explotado? Porque eran parte...
Hace un mes, más o menos, varios empezaron a destapar la olla en Twitter, algunos con usuarios anónimos o con nicknames que no llevan nombre y apellido. Es que Twitter tiene una política algorítmica algo estúpida y con una buena cantidad de denuncias te pueden suspender la cuenta... aunque no hagas nada malo.
Lo cierto es que, para resumir, existe una organización llamada "Zoe" que presuntamente es un esquema piramidal combinado con otros condimentos como: religión (evangelistas), coaching ontológico, criptomonedas (tienen su propia "Zoe Cash"), Inversiones, "Doctores en Traidin", abogados turbios defendiéndolos y demandando a todo aquél que ose exponerlos y mucha, mucha gente con limitaciones cognitivas variadas y algo de ahorros.
Estoy resumiendo todo porque es más fácil buscar las decenas de notas que explican todo esto pero no es el punto de la nota sino cómo se fue gestando la "confianza" y la "seriedad" de todo esto.
Me encanta porque los va preparando desde el primer momento para perderlo todo. pic.twitter.com/5GiU04jOi8
— Osvaldo 'Beto' Mendeleiev (@BetoMendeleiev_) February 20, 2022
Hoy la nota es que todos están siendo investigados, que miles de personas perdieron todos sus ahorros y con los supuestos estafadores y sus abogados jugando la carta de "perdieron por codicia, sabían que era un negocio de riesgo" cuando, en realidad, todo es muy distinto (y no, nunca advertían del riesgo y engatuzaban a gente MUY bruta).
Tengan en cuenta que esta gente prometía ganancias de un 7% mensual a la inversión y últimamente, como se había ido cayendo a pedazos, inventaron un supuesto juego online donde la promesa subía a 15%.
Como siempre, los únicos negocios donde el margen es tan bueno es en las estafas, en la venta de drogas y armas y cosas así, pero la gente desesperada es MUY FÁCIL de convencer.
¿Por qué tanta gente ignorante cae en estafas como la de Cositorto y #GeneraciónZoe? Porque creen en lo que les dicen por TV una manga de brutos, irresponsables y chantas como estos.
(Escuchen a @GabyGonzalezOk, y recuerden que estos estafadores dicen vender educación). pic.twitter.com/SF5kwV4T32
Desde hace muchos meses atrás los personajes que ahora son investigados aparecieron en distintos medios siendo apoyados por conductores de distintos programas y redacciones comerciales de muchos sitios.
Aquí es donde la cosa se pone turbia para muchos y explica, o al menos genera sospechas, el gran silencio que durante meses mantuvieron cuando había una gran movida de dinero delante de sus narices.
La cuestión es que los medios se están muriendo de hambre, no es novedad esto, es algo que viene sucediendo desde hace décadas. Hubo muchos cambios y ya el poder que antes tenían los grandes medios no es el mismo, no el económico. Para sobrevivir necesitan vender espacios.
@pampitaoficial en su programa Pampita Online así recibía a Cositorto y le hacía este infomercial. pic.twitter.com/qx5jZQzBMw
— matiasreggiardo.eth ?? ?? (@reg_mati) February 18, 2022
Y aquí es donde se fusiona el periodismo con la venta comercial de espacios, la publicidad, el marketing y las relaciones públicas.
Dejan de estar separados, no existe tal cosa como la ética periodística si uno asume que lo que está haciendo no es periodismo aun sin avisarle a la audiencia. Y no hablo de medios menores, hablo de los más grandes de Argentina, ninguno escapa a esta tendencia.
@AngeldebritoOk en LAM así recibía y presentaba a Cositorto para promocionar a Generación Zoe, inneglablemente un infomercial pago. pic.twitter.com/MiBNb7cLKR
— matiasreggiardo.eth ?? ?? (@reg_mati) February 18, 2022
En numerosos programas de TV que juegan entre medio de lo informativo y la opinión, por ende se autoexcluyen del periodismo cuando les conviene o se hacen los serios cuando la situación lo amerita, se vende el espacio para que alguien vaya a vender su propuesta.
No hay filtro, si tiene dinero, se vende.
El productor no anda con vueltas, pone un precio, si el cliente está dispuesto a pagarlo sale en vivo con el conductor del programa siguiéndole la corriente con un guión a veces predefinido o armado minutos antes de salir al aire.
Mariano Iúdica en Polémica en el Bar junto a Gaby Gonzalez promocionaban a Zoe. pic.twitter.com/CZJas5ESIp
— matiasreggiardo.eth ?? ?? (@reg_mati) February 18, 2022
No es de extrañar que esto no tenga control alguno desde lo ético, es un programa de entretenimientos ¿No? ¿Qué responsabilidad tiene? Cómo se van a creer todo lo que se dice en la TV? Esa sería, en teoría, la hipótesis que usan para darle marcha adelante a esto sin preocupación alguna.
Lo interesante es que no fue sólo en la TV, claro que no, para tener un buen SEO hay que aparecer en los buscadores y para ello existen los sitios web... de grandes medios.
Aquí empieza lo borroso ¿Son notas patrocinadas? ¿El lector lo sabe?
Hace unos años los grandes medios gráficos nacionales pasaron a la web, algunos rápida y ágilmente (Infobae), otros más lento y reticentes (Clarín) y la merma de venta de ejemplares impresos llevó a algunos a eliminar el papel (Infobae) o a reducirlo drásticamente (Clarín, La Nación).
Aquí es cuando descubrieron que lo que podían cobrar por la publicidad en papel era completamente distinto en digital. Ya nadie te pagaría una página enorme por una fortuna bajo el supuesto lectorado, ahora se podía medir con precisión y discutir el precio que, además, con un lectorado real y contabilizable era más difícil de mentir.
Esto llevó a las editoriales a apelar a algo que usualmente era "prohibido" en un "medio serio": el contenido patrocinado.
el 10 de diciembre de 2021 increíblemente @vivicanosaok presentaba a Leo Cositorto como "analista político". pic.twitter.com/NTcaiZTKkb
— matiasreggiardo.eth ?? ?? (@reg_mati) February 18, 2022
No olvidar que los blogs hacíamos eso desde el comienzo y se nos criticó mucho si no poníamos un enorme cartel avisando que un contenido era patrocinado. Claro, esa exigencia sólo se le requería a algún bloguero reconocido, a los inmorales de siempre se les festejaba y permitía todo.
En redes sociales hasta es un asco de patrocinios sin aclarar aun cuando en algunos países existen leyes específicas para esto, sí, todos las violan, olvídense de las reglas :P
Pero los medios tradicionales también capitularon y empezaron con una idea que me pareció muy interesante, crear como unas mini-agencias dentro del medio para producir esos contenidos y ubicarlos como notas.
Ahí es donde la cosa es complicada ¿Son notas? Doy un ejemplo, Clarín tiene a "Brand Studio" que es una división interna que genera esos contenidos, produce la idea y la publica. El lector sólo tiene como aviso ese ínfimo cartelito que dice "Brand Studio" para enterarse que no es un contenido periodístico sino que es publicidad.
Adivinen quién más pautó allí... y sí, Generación Zoe.
En este caso con un lindo cartel que decía "Contenido patrocinado" porque, sin dudas, lo era y, además, estaba en el borde del Ponzi.
Meses antes también había pautado lo siguiente:
Cuando todo esto explotó lo borraron al igual que Infobae con el siguiente patrocinado:
Que ni siquiera llevaba mención alguna de ser un contenido patrocinado para promover este claro esquema que no pasó filtro alguno.
Aquí es donde, para mí, hay un claro conflicto.
En otra época el editor de un medio aprobaba qué se publicaba y qué no, sólo en el contenido. Tiene lógica porque la publicidad iba separada del contenido.
La publicidad también pasaba un filtro: uno no podía anunciar un club de pedófilos en un anuncio, te lo rebotaban y, aun sabiendo que el medio no tenía responsabilidad por ese anuncio, no querían "pegarse" con algo que los iba a dejar mal a ellos.
@pabloduggan le hacía esta nota a Leo Cositorto en Radio Diez pic.twitter.com/PAiX6jGiTm
— matiasreggiardo.eth ?? ?? (@reg_mati) February 18, 2022
En la era de la desesperación por dinero que viven estas líneas divisorias desaparecieron: el editor deja que se publique contenido de redacción patrocinada y nadie chequea que el "pegarse" les haga daño.
La estrategia es simple: "si pasa, pasa" y si no pasa se borra como hicieron ambos medios que son los que más tráfico tienen en Argentina. Cabe destacar que no encontré algo similar en La Nación pero ese otro medio suele publicar notas similares de estafadores de salud y las mal llamadas "medicinas alternativas" así que no está excento de este pecado editorial.
Al ser artículos que no diferencian claramente lo editorial de lo publicitario ¿Qué responsabilidad les cabe? ¿Son objeto de demanda? No soy quién para responder esas preguntas pero desde la opinión personal los considero claramente cómplices, por acción u omisión, cómplices.
Aquí voy a hacer otro comentario personal, el otro día alguien decía abiertamente que no debíamos llamar "pelotudos" a los que cayeron en esta estafa.
Yo creo que sí son pelotudos, pero ser pelotudos no es un delito, estafar a un pelotudo sí lo es.
La codicia jugó una parte en algunos, sin dudas, el querer salvarse sin trabajar, salir de la pobreza sin el más mínimo esfuero. Pero también la desesperación.
Mucha gente que entró en estos esquemas (éste o cualquier otro, está lleno) lo hace también trabajando y esforzándose mucho y lo que invierte son sus ahorros de toda la vida. Es gente muy estúpida, sí, pero los engañadores buscan precisamente a esa gente.
Hasta hay tácticas muy claras que usan para captar gente. Por ejemplo, TODOS sus sitios web están llenos de faltas de ortografía y errores muy básicos, ninguna persona educada caería: ese es el objetivo.
Si pasan ese primer filtro es que son lo suficientemente burros, y si no saben ni leer ni escribir es altamente probable que tampoco tengan ningún tipo de educación financiera.
La TV, Internet y todos los medios te bombardean a diario con la idea de que hay gente que con apostar unos pesos a una cripto, un nft o una inversión en la bolsa se hace rica de la noche a la mañana. La realidad es muy oscura, por cada ganador hay millones de perdedores, como en un casino, pero eso no te lo cuentan.
La nota que más llama la atención es la del éxito, la de los millones, los aviones privados, el yate de lujo, las putas rusas y el caviar. Y la masa consume esa idea, por eso es tan fácil de engañar.
Cuanto más crédulo mejor, más bruto, mejor y esta gente encontró una combinación muy particular y estudiada durante años de engaños similares.
La combinaron en una nueva forma de coaching, grupo de pertenencia, religión y promesa de salvación en vida, mucho dinero y nunca más trabajar.
Sí, son víctimas, pero son pelotudos también. Ahora bien ¿El responsable es único?
El punto de esta nota era mostrarles cómo no es así, que hay una construcción que se hizo durante meses (o años) para llegar a este punto y todos los que ahora llenan sus páginas o canales "denunciando" fueron partícipes de alguna forma, todos por codicia, por dinero fácil, desde el estafado hasta el medio más grande, todos por igual.
Y se está llenando de estafas similares ya que el país está en un borde peligroso económico y la pobreza por encima del 50% hace eso insostenible. Cada pequeño ahorro de un pobre es, potencialmente, víctima de estas estafas por la desesperación por multiplicar eso por un poquito más.
Para aquellos que quieran evitar que un familiar o amigo caiga (nuevamente) en una de estas estafas les recomiendo mi artículo Cómo detectar una estafa piramidal
PS: para los defraudados por Cosit... acá está fugando la guita que le queda :P