Entrás al restaurante, muy bonito todo, super cheto, calidad, nivel, una promesa de una excelente velada, le mirás el rostro a tu acompañante, una sonrisa se genera entre ambos. Una velada inolvidable, te atienden como a la realeza, le pedís la carta...
ACÁ TENÉ EL QR
La odisea del QR y la madre que lo parió.
Desde 2020 que los restaurantes, en medio de pandemia de COVID, decidieron optar por una versión digital de sus cartas. En vez de imprimir en papel y/o un cartón de buena calidad, en vez de acercar algo físico, el "protocolo" que nadie había definido pero que naturalmente decantó fue "no te doy nada, encontralo aquí".
El código QR es tan sólo una forma de esconder una URL de forma "sencilla" aunque eso no es necesariamente más fácil para todos. Por suerte la mayoría de los teléfonos pueden detectar uno y brindarte un enlace para ver, pero la odisea apenas está por comenzar.
Al abrir un enlace tenemos dos problemas, uno la falta de conectividad, todo bien con tu restaurante hecho en un bunker de la Segunda Guerra pero ¿Me podrías pasar el WiFi primero? Otra media hora hasta que puedes encontrar un mozo que te atienda para decirte la clave y para recibir un "ah, pará que no me la acuerdo, ya te la averigüo" aun cuando todos los clientes se la piden a diario y después resulta ser el nombre y número de calle del mismo restaurante.
Luego la velocidad de conexión, por alguna razón tarda, tarda muchísimo en descargar. ¿Por qué? Pues porque un restaurante se encarga de servir comida, no de tecnología, no saben una mierda y pusieron en un PDF el mismo menú que mandaban a una imprenta a imprimir.
UN PDF
Tenemos teléfonos portátiles con browsers modernos que cumplen con todos los test ACID y, sin embargo, para el menú pasamos a un formato que existe hace 30 años, no fue creado para ver en un celular, es un formato que preserva el formato así que si el diseñador le puso su magia al menú veremos una tipografía Garchafont 8pt que no se lee ni con una lupa.
Tenemos que hacer zoom a mano, pero olvidate del scroll, cuando querés scrollear resulta que tu teléfono tiene activados los gestos e interpreta el moverse para un lado como "cerrar", DESAPARECE EL PDF, otra vez a capturar el QR.
BASTA, es hora de decirle basta al QR, al PDF, quieren una url? que sea el puto nombre del restaurante punto com, ¿La carta? debería tener un click ahí, un botón, fácil de acceder o directamente en la portada.
Sitio en HTML, responsive, que se adapte a CUALQUIER pantalla, sin tener que hacer zoom ni nada, todo ahí adaptable al usuario.
La excusa, berreta, estúpida, "yo no se de esas cosas" o "ya lo tengo en PDF, es lo mismo", NO, NO ES LO MISMO.
Hasta uno podría pedir más cosas pero se limita porque encontrarlas es imposible, zoom in, zoom out, se cierra, se pierde el PDF, incomodidad, toda la categoría de un lugar se cae por la borda la ofrecer el nefasto QR.
Es hora de volver al menú de siempre, okey, es más lento para ser actualizado, no importa, dame una hoja A4 impresa recién, chorreando tinta, es más útil.
PS: no se si esto se hace en el resto del mundo, no me importa, tampoco me importa si es más higiénico (echale un litro de alcohol ante cada uso y listo), basta de QR.