
Muchos de mis lectores son 40+ así que pasaron inevitablemente por la etapa Dial Up si es que se interesaron por Internet cuando era una "novedad", por ahí no pudieron usarlo directamente porque el precio de una PC les era prohibitivo, pero saben de qué hablamos y del famoso "ruidito" del modem conectándose.
Parece mentira, pero el tiempo transcurrido entre la era del Dial Up y de la banda ancha es extremadamente pequeño en términos humanos, sin embargo las diferencias son notables y hablamos de dos mundos distantes en lo que a experiencia de navegación se refiere.
AOL acaba de matar, para bien, los últimos Dial Up que le quedaban activos, y lo increíble es que AOL siguiera existiendo, pero no es eso a lo que voy sino al salto gigante que dimos en nuestras conexiones, algo que damos por hecho hoy y que hace tan poco tiempo era tan diferente.
Cuando nací ya existía el Dial Up, sencillo, era una llamada telefónica, un modem, un dispositivo modulador-desmodulador que existe desde los años 60s, se hacía un llamado telefónico y esas dos líneas hablaban entre sí con sonidos como si fuese una conversación.
Considerando que hay gente que actualmente no tiene ni idea de qué estoy hablando, y me refiero a la llamada donde la gente habla, es fascinante lo rápido que se perdió el uso de una herramienta tan poderosa: transmitir la voz a distancia.
Hoy cuesta lograr que alguien te hable, te mandarán audios, pero los audios no son convesación, hay gente de mi edad que se crió con los teléfonos de línea y que actualmente no tolera la idea de que alguien lo llame por teléfono sin avisar antes.
Los teléfonos eran dispositivos primitivos, no celulares, no iban en tu bolsillo, estaban conectados con un cable a la pared, tenías que "discar" porque un disco con números era la única forma de indicarle a quién querías llamar. Todo ese conocimiento irrelevante pasará a la historia, hoy en día mucha gente no sabe por qué se dice "discar" siquiera.
Era llamar y tener suerte que alguien atendiera del otro lado, podía no estar, si estaba en el baño tenía que salir corriendo con los pantalones en los tobillos a atender, y justo cuando llegabas a hacerlo el otro había desistido: no sabías quién te había llamado, no había ID de llamadas, a joderse o gastar una llamada en la operadora.
Ah, si, todo era caro, muy caro, te cobraban por respirar y cada llamada significaba dinero.
El salto a la comunicación por modem de una computadora a otra fue demencial. Hasta ese momento mi PC era una burbuja que sólo podía conectarse a otras PCs con diskettes.
Nuestro primer experimento con "los muchachos" (kNOW) fue un cable serial, en algún momento lo comenté en el blog, todavía lo conservo. Un cable de PC a PC que iba entre los puertos seriales (también hice uno para el paralelo que andaba como el culo).
En el primer mundo, y en Buenos Aires, ya existían los BBS, pero en la lejana Bariloche era algo extremadamente caro, ni siquiera considerábamos comprar un modem porque no tenía lógica una llamada de larga distancia, no sólo no iba a funcionar (mucho ruido en la línea) sino que era imposible por el costo.
Fue recién en los noventas que el mundo se abrió para nosotros. Y cuando digo se abrió no tienen una idea de lo que nos rompió la cabeza.
De pronto con un modem de 14.4k podías acceder a... ¡Sitios Web! qué era eso? Una locura, era tan lento y hermoso a la vez, parecía rápido porque la otra opción eran diskettes, imagínense bajar tu primer megabyte de información, fotos, texto, enlaces, era demencial.
Pasamos a los 28.8, 36 y a los 56kbps nos clavamos. El sonido del modem era hasta comprensible para nosotros, porque entendíamos por sus murmullos y quejas cuando se estaba conectando bien y hasta a qué velocidad lo iba a hacer (me acuerdo que a veces fallaba a 56kbps y desconectaba y volvía a conectar, jamás 28.8, cosa de pobre!).
El punto de todo esto es que no pasó nada de tiempo, en 25 años pasamos de esa experiencia de pobreza total y línea telefónica ocupada a instalar un cablemodem o ADSL a la fibra y, en especial, al WiFi que todos dan por sentado.
Hace 15 años no había WiFi en todos lados, hace 10 hubo un boom tan grande que no es tolerable un lugar con un WiFi que no funciona.
Eso me hace plantear muchas veces qué sucedería si de pronto dejara de funcionar, ni el 4G ni el WiFi, tener que volver a una PC de escritorio conectada a un cable, como si el cable para muchos fuese un grillete que los ata a una piedra enorme.
Los teléfonos de línea dejaron de existir, la mayoría de las telefónicas los cambiaron por aparatitos que "simulan" ser un teléfono de línea, pero en realidad son dispositivos VoIP o con un Sim 4G pero al que se le puede conectar un teléfono "normal".
De hecho, hasta el ícono de telefonía en un celular pasó a ser una cosa secundaria, llamar es secundario.
Esto tiene sus contras, en la era del Dial Up uno "ocupaba" la línea por querer entrar a Internet, en la era actual ni siquiera quieren una línea, les aterra un llamado, que del otro lado se escuche una persona, alguien que les habla, alguien que los puede incomodar o contrariar, quieren que la vida sea un total Broadcast donde el otro escuche y no se queje.
Es raro, es extraño, cuando creía que lo que estábamos consiguiendo era más comunicación, era tenerlos más cerca y verlos más seguido, logramos exactamente lo opuesto.
El sonidito del modem tal vez era un aviso en un lenguaje desconocido que nos advertía, nos decía "cuando te olvides de mí ya no sabrás comunicarte" y creo que poco a poco vamos a eso.
La era del Dial Up murió hace mucho tiempo, pero algunos la vivimos como un momento de descubrimiento y exploración de un nuevo mundo.